PROPUESTA PARA UNA POLÍTICA CULTURAL

1. La vida imita al arte, esta es una sentencia básica de todas las sociedades en todos los tiempos. Los artistas  y los filósofos no tienen límites, van más allá de la realidad e inventan otros mundos. Esta libertad estimula la ciencia, las técnicas y todas las actividades humanas. De ahí que la cultura es fundamental para el  desarrollo.
2. La cultura eleva el espíritu de la sociedad y en tal orden crea un clima que favorece todas las actividades en todos los órdenes.

3. En las sociedades modernas corresponde al Estado encabezar los esfuerzos culturales, evitando la perniciosa administración patrimonialista.

4. En los últimos años el Estado no solo no ha ejercido el liderazgo que le corresponde sino que en mucho se ha distraído en otros intereses y ha perturbado la vida cultural que la sociedad civil, no sin dificultades, ha desplegado con entrega y en no pocas ocasiones con pasión.

5. Convendría evaluar la eficacia que pueden tener las manifestaciones culturales de nuestra sociedad civil en nuestra paz y en el turismo, así como en la imagen del Estado en todo México y el extranjero.

6. Un órgano promotor de cultura tiene las funciones de: preservar, generar y difundir manifestaciones culturales en sus distintas variedades, incluida la cultura popular. Pero al mismo tiempo se tiene que insertar al Estado en la cultura nacional e internacional. Tanto más ahora que inicia una nueva era  que ha demostrado un gran interés en la cultura.

 PROPONEMOS:

1. Que se regrese al esquema de Instituto descentralizado liberando así a este órgano promotor de las opresivas instancias burocráticas.

2. Que este Instituto tenga un consejo efectivo que: asesore, sugiera y en su caso revise y autorice los programas culturales.

3. Será función de este consejo, y del director designado, la creación de un proyecto cultural. Cierto: hay investigaciones y aproximaciones, pero se requiere crear un todo un cuerpo armónico.

4. Dada la trascendencia de la vida cultural en el Estado  sugerimos que se nombre como director o directora a una persona con el perfil para encabezar estos esfuerzos.