EL CAMPO CONVERTIDO EN CIUDAD,  LAS HACIENDAS INTEGRADAS A MÉRIDA.

 

Mérida, como es fácil aceptar,  estuvo rodeada de haciendas desde la  Colonia hasta el siglo XX. Estas haciendas han sido integradas a la ciudad dando lugar al nacimiento de nuevas colonias. En un detallado trabajo la Dra. Blanca Paredes nos da cuenta de esos cambios y del nacimiento de las flamantes colonias. Algunas de esas haciendas que pasaron a formar parte de Mérida , son: Santa Rosa Chohbac, San  Diego Azcorra, Pacabtun, Petcanchè, Buenavista, Tanlum , Xoclàn, San Lorenzo, Tecoh, Mulsay, San Isidro, Multunicuc, Chenkù, San Juan Bautista Tzeal, San Lorenzo, San Géronimo y San Sebastián, Joloch, Xcumpich, San Pedro, Chichí, Santa Rosa (otra), Dzoyolá, Tahdzibichen, Mulchechem, Texán, Tixcuytún, Tzacalá, San Antonio Cinta, Xoclán, Xmatkuil,  Ticimul, San Marcos Nocó, San Nicolás Yaxnic, Siskal, Itzincab, Santa Cruz Palomeque, San Antonio Cucul, Dzodzil Norte y ciertos terrenos que pertenecieron a Ochil; y las dos haciendas mágicas que provienen de los tiempos de la Colonia: Wallis y Dátil y Limón ,  llamada después San Cosme y hoy García Ginéres.  La determinación de los límites de las haciendas es un trabajo complejo no siéndolo menos la precisión de la naturaleza de las tierras: hacienda o anexa . Desde luego que hubo haciendas tan vastas que dieron lugar al nacimiento de varias colonias. Aun así esta lista enunciativa nos da una idea de las haciendas que fueron deglutidas por la ciudad , proceso que no se ha detenido , inclusive se ha hecho más voraz pues hasta de poblaciones da cuenta una ciudad que se desborda a sí misma. Es necesaria una acotación : gran parte de los   del sur de la ciudad eran propiedad privada y así fueron vendidos a los nuevos colonos.