En la Colonia las cofradías, y hasta la orden religiosas de las concepcionistas, financiaban a hacendados y comerciantes. Las tasas de interés que solían cobrar oscilaba entre el 5% y el 6%. El 24 de septiembre de 186 , en tiempos del Segundo Imperio, se creó el Banco de Avío de la Península, con un capital de 15 000 pesos  para dar prestamos de entre 25 y 250 pesos. Los préstamos era para artesanos, agricultores, industriales y pequeños comerciantes. Cuando cayó el Imperio Manuel Cepeda Peraza liquida el banco y  su capital fue dividido entre la biblioteca del Instituto Literario de Yucatán y el Hospital General de la Ciudad. A mediados del siglo XIX solo existían tres bancos en México: Banco de Londres y México, Banco de Santa Eulalia, en Chihuahua; y el Banco Mexicano. En Yucatán los albores de la industria henequenera se financiaban con la banca extranjera. Hubo una tentativa que no funcionó: el Banco Mercantil y Agrícola. En el año de 1879  Emilio McKinney fundó la Caja de Ahorros para beneficio de clases populares. Al año siguiente se fundó la Casa de Empeños en General propiedad de don Santiago Mestas. El 29 de marzo de 1882 el Congreso del Estado autorizó al gobierno a contratar sucursales para Mérida de los bancos Mercantil Mexicano y Nacional Mexicano, estos dos bancos se fusionarían más adelante dando lugar al Banco Nacional de México. A instancias de don Olegario Molina empezó a  funcionar en Mérida, el 1 de febrero de 1890, el Banco Yucateco, con un capital inicial de 700 000 pesos. El primer director de este banco fue Manuel Pinelo Montero, el consejo de administración lo integraron: Nicanor Ancona, presidente; Fernando Cervera, secretario; Eloy Haro, comisario; Olegario Molina Soís, Alonso de Regil y Peón y Florencio Laviada, consejeros. Los principales accionistas eran: Pedro Peón Contreras, Rodulfo G. Cantón, Remigio Nicoli, José Dominguez  Peón, Olegario G. Cantón, Sixto García, José Millet Hubbe, Juan Urcelay Martínez, Juan Hoffman, Leandro León Ayala, Rogelio V Suarez, Anselmo Duarte, Avelino Montes y Enrique Muñoz Aristegui. Otro grupo de hacendados, dirigido por la  familia Escalante, inauguró el 4 de marzo de 1890, el Banco Mercantil de Yucatán  que tuvo un capital de 500 000 pesos. El apoderado general de este banco fue Benito Aznar Santa-María. Integraron el consejo de administración: Eulogio Duarte Troncoso, presidente; Eusebio Escalante Bates, secretario; Augusto L Peón, comisario; Rafael Otero Donde, Raimundo Cámara Luján y Joaquín Peón, consejeros. Sus principales accionistas eran: Eusebio Escalante Peón, Enrique Espinosa, Manuel Zapata Martínez, Manuel Preciat Donde, José María Ponce, Eduardo Pinkus Troncoso, José Juanes, Emilio Peón y Leandro León Ayala. Este banco llegó a tener un capital de 8 000 000. En 1898 se constituyó la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Yucatán, su función: facilitar pequeños prestamos. En el verano de 1925 abrió sus puertas en Mérida el Banco de México. El 2 de mayo de 1934 abrió sus puertas un banco legendario: el Banco de Yucatán, sus accionistas fueron: la familia Vales, la familia Ponce y la familia Macari. En el año de 1936 abrió sus puertas en la ciudad el Banco de Londres y México. En abril de 1941 abrió sus puertas el Banco Peninsular de Comercio que fue dirigido primero por don Rafael Salazar Trejo y después por don Alvaro Domínguez Peón. Don Vicente Erosa Cámara propuso a la Cámara de Comercio de Mérida la creación de una Unión de Crédito. Los consejeros de esta institución fueron: Miguel Peón de Regil, Julio Patrón Cervera, Víctor Suárez Molina, Rafael Salazae Trejo, Manuel Rodríguez Cervera, José María Iturralde Rivero, Arturo Ponce G. Cantón, Adolfo Chauvet, Alfonso Rivas, Francisco Faller Manzanilla y Enrique Ferraez Padilla. Esta institución dio lugar al Banco del Sureste. Este es otro de los bancos legendarios de la segunda parte del siglo XX. Había abierto sus puertas el 1 de febrero de 1944. Años después abrieron sus puertas la Financiera Peninsular y la Financiera del Sureste, ambas vinculadas a los dos bancos más importantes a los que hemos hecho mención.

El 12 de abril de 1945 abrió sus puertas el Banco Familiar de Ahorros de don Alberto García Cantón. A finales de los cincuenta abrió sus puertas el Banco de Comercio, eran sus consejeros: José Martínez Cue, presidente; consejeros: Emilio Castellanos Loría, Alejandro Gómory Aguilar, Mario Gamboa Sauri, José Socorro Rodríguez Arceo, Hernán Puerto Triay, Alvaro Dominguez Peón, Luis Achurra Egurrola, Juan Macari Canán , siendo comisario : Michel Jacobo Eljure. Entre los bancos locales hay que mencionan al Banco de Campeche  presidido por don Juan Millet Rendón y el Banco Hipotecario presidido por don Manuel Ríos Covían. Desde luego abrieron sus puertas bancos nacionales públicos y privados.