Artículo publicado en el Diario de Yucatán día 21 de Noviembre de 2013
La traza de Mérida ha descansado a través de los siglos en un eje: el cruzamiento de las calles 60 y 61. El kilometro 0 del Estado se encuentra en la cruz del atrio de la Santa Iglesia Catedral. El primer paseo de la ciudad fue el que comprendía del obispado –hoy Ateneo- a la iglesia de Santa Anna y por eso llevaba este nombre. En los tiempos de la Colonia la calle 61 unía el barrio de Santiago en el poniente con La Mejorada en el oriente. La 60 tenía su tramo aristocrático en el paseo y su introducción a un sur que apenas llegaba a la calle 75 aunque se desfiguraba a las espaldas de San Juan. A finales del siglo XIX se marca la tendencia al norte de la ciudad con las avenidas Reforma y Montejo pero en 1906 la ciudad cambió y los límites también. Se inaugura formalmente el Paseo de Montejo, se traza la Pérez Ponce y se inaugura la Avenida de la Paz, que es quizás la que más nombres tiene en la ciudad: Paz, Pino Suárez , Itzaes, Internacional y en una época, Aviación; fue la calle 59 la que vinculó al poniente con el oriente. Ahora se iba más allá de Santiago: de Mejorada se podía llegar por la misma calle hasta uno de los complejos más impresionante que había tenido la ciudad después de la Plaza Principal: la penitenciaría , el Centenario, el Hospital O´Horan y el Asilo Ayala. La calle 59 , llamada Porfirio Díaz, tenía su tramo aristocrático de la Plazuela del Jesús a Mejorada. Pero la calle 60, inmutable cumplía su labor. Fue hasta los tiempos de Alvarado que se logra una subida más abriéndose la Avenida Colón que conectaba con Paseo de Montejo, Pérez Ponce y con la calle 50 lográndose así una nueva vinculación entre el poniente y el oriente. Alvarado patrocinó la colonia Jesús Carranza que después quedaría vinculada a la Alemán. En los setentas se abre una nueva vinculación, todo ya en el franco norte. Esta novedad era más complicada y por eso más ambiciosa: el Circuito Colonias. Naciendo en la estatua a Hidalgo que es la génesis misma de la Itzaes se prolonga hasta el norte-oriente de la ciudad, uniendo a las colonias Buenavista, Campestre , México y con alcances a otras tantas colonias. El Circuito Colonias se une con la Avenida Correa Rachó y ésta con Altabrisa que desemboca en el periférico. Pero nuestra calle 60 es la única que atraviesa la ciudad de sur a norte. Es la calle más larga de Mérida si contamos que se funde con la carretera a Progreso o que la toma. La calle 50 se diluye en la Pérez Ponce y la 66 atrás de la ex Caballería y ex Policía del Estado. La calle 60 a pesar de esta nobilísima particularidad no tiene nombre. Aunque la pavimentación del sur de la ciudad se da a partir de los años setentas, y por lo tanto se disponía de más opciones para trazar calles y avenidas que lo unieran con el norte, no hay mayores esfuerzos en ese sentido. Se precisa una aclaración: el periférico es de los años setentas también y ya pretendía una vinculación que se ha hecho realidad con gran intensidad del tráfico. Se están haciendo trabajos a favor de la calle 60 . Sano sería que se restableciera el antiguo paseo y se hicieran otras consideraciones sobre esta trascendente vía de la ciudad.