Autor: Carlos E Bojórquez Urzaiz
Pionero en el estudio de la histología en Yucatán, el doctor José Palomeque y Solís, nacido en Mérida el 1 de abril de 1847, se distinguió por su entrega a los estudios aun antes de cursar la carrera en la Escuela de Medicina.
Obtuvo su doctorado en medicina el 31 de agosto de 1846, con una tesis sobre la Anatomía de la región nasal. Y en 1847 recibió la agregación en Historia natural, con su tesis titulada Les Fermentations. Ese mismo año obtuvo el doctorado en ciencias naturales.
Las enseñanzas recibidas por el doctor Palomeque en Francia fueron decisivas en su formación académica, aunque precisó interrumpirlas a causa del estallido de la guerra franco-prusiana (1870-1871), pues su maestro pasó a dirigir los servicios médicos de las fuerzas armadas.
En esas circunstancias el doctor Palomeque y Solís decidió regresar a Yucatán y en seguida se dedicó a la práctica clínica, alcanzando reconocimiento por sus diestros servicios profesionales y el trato humano que dispensaba a sus pacientes.
La Escuela de Medicina de Yucatán, entonces abierta a los avances de las ciencias que traían los médicos que perfeccionaban su formación en Paris, Nueva York y La Habana, hizo una atenta invitación al doctor Palomeque para que impartiera la cátedra de Anatomía en 1870, a pocos meses de haberse reasentando en su tierra.
Un año más tarde, dictó su cátedra de Histología con excelencia, a la que según registros de la época asistieron como oyentes varios médicos graduados que estaban al tanto del magisterio que recibió del doctor Robin en París el galeno yucateco.
Dueño del bien ganado prestigio que tuvo, el doctor José Palomeque y Solís impartió varias cátedras hasta que el Consejo de Profesores de la Escuela de Medicina lo eligió su director para el bienio 1888 y 1889, resultando reelecto un período más.
Para entonces el doctor Palomeque había casado con doña Adelaida Pérez de Hermida y Peón, con quien tuvo varios hijos.
Por lo demás, el hermano mayor de este médico, el poeta Manuel Palomeque y Solís, fue autor del llamado Himno Yucateco, cantado por primera vez el 4 de junio de 1867, por el triunfo de las armas republicanas contra el segundo imperio mexicano y el emperador Maximiliano.
Cercano al liberalismo y merecedor de un bien ganado prestigio, el doctor Palomeque fue invitado por el gobernador Carlos Peón Machado para ocupar el cargo de secretario general de Gobierno de 1894 a 1897. Durante las ausencias del gobernador Peón Machado, en 1896, por designación del Congreso de Yucatán, fue suplantado por el doctor José Palomeque y Solís en el cargo.
Retirado del ejercicio de su profesión a causa de severos problemas de salud que padecía, abandonó Yucatán en 1915 y se estableció en La Habana, donde su hija Margarita casó con el cubano Eduardo Muñoz. Poco después viajó a Nueva York, y derivado de una complicación quirúrgica, el doctor Palomeque falleció en 31 de octubre de 1918.
El 12 de diciembre del mismo año sus familiares trajeron sus restos áridos a Mérida, donde se le recuerda como un ilustre médico y maestro de muchas generaciones.— Mérida, Yucatán.