El mercado de los bienes raíces es una alternativa del mercado financiero, al menos desde finales del XIX. El fenómeno cobrò fuerza con la crisis de finales de los veintes del siglo pasado y con el advenimiento de las inflaciones severas.
El ahorrador se siente protegido con materiales sòlidos y vulnerable con su dinero en el banco. Esta fue la base, el resto lo hicieron nuestra paz y cultura y el hecho de que casi todo Mèxico estè en llamas. Mèrida se volvió una alternativa financiera. Un número importante de los proyectos inmobiliarios se venden fuera de Mèrida, quizás para gente que ni siquiera pretende venir a vivir a esta ciudad, sino solamente proteger su dinero.
Cierto: también hay una inmigración significativa, con una característica : los inmigrantes no vienen buscando trabajo, porque no lo ofrecemos, vienen en busca de calidad de vida. Esto ha propiciado la elevación de los precios de terrenos, construcciones y rentas, asi como presiones sobre el desarrollo urbano de la ciudad. Verdad es que el aumento en los precios no por previsible deja de ser sorprendente y , por momentos, hasta inquietante. El precio suele ser resultado de la demanda y la oferta.
El valor es ajeno al precio y se mueve con gran dificultad, tendiendo siempre a buscar su nivel. Asi es como el precio pude caer o ajustarse. Por otro lado casi todas las ciudades de América Latina , y algunas de los Estados Unidos, han sido víctimas del mercado. Puede llegar a ser tan fuerte el vigor del mercado que genere tensiones en la vida de los ciudadanos. Esto ha llevado a algunas ciudades europeas a la observancia de un principio: cuando un desarrollo se enfrente a los ciudadanos la razón la tendrán éstos.
El ciudadano es primero. Se precisa no confundir algunos servicios: tiendas de conveniencia, farmacias, cajeros, escuelas, etc., que finalmente están al servicio de los ciudadanos y que se pueden conciliar con la vida cotidiana. La sustentabilidad es descendiente de la estructura barrial que nos hemos empeñado en abandonar y que, curiosamente, hoy constituye el eje de las campañas a la alcaldía de París.
Sin embargo esas batallas son arduas y a menudo martirizan a las ciudades. Aunque pueden ser conciliables el desarrollo del mercado inmobiliario con la vida y el orden de la ciudad, en ninguna forma constituye una sentencia fatal. Una de las cualidades de la ciudad : su traza radial , se perdió antes de que se dinamizara el mercado inmobiliario.
La mayoría de las 42 calles que vinculaban al centro histórico con el periférico no cruzaron esa arteria. Está en nosotros conservar las virtudes de la ciudad o enmendar los pecados cometidos. Se han observado que son cuatro las oportunidades de Mérida en la actualidad: inmobiliaria, educativa, de salud y turísticas.
Así es: los padres de jóvenes universitarios de algunas ciudades de México y Centroamérica desean enviar a sus hijos a estudiar a Mérida. Otro tanto se buscaría en el campo de la salud. Esta revelación de Mérida nos ofrece mucho si somos capaces de manejarla.