Este es el nombre de la novela escrita por Pedro Peon Roche. El dice que se trata de una novela sobre la Península de Yucatan que tiene como telón de fondo la historia de su abuelo, don Joaquín Roche Martínez. Sin embargo queda la sucinta sospecha que hace lo mismo que Juan Preciado en Pedro Páramo: ir en busca de sus muertos. Este ejercicio es de celebrarse: no abundan en la literatura yucateca. Y en el caso de Pedro este sería el segundo. Le debemos gratitud al autor por lo bien escrito que está el libro. Respetuoso de la clásica artesanía literaria atrapa al lector y lo va llevando por la vida de sus antepasados. Don Joaquín Roche Martínez construyó con su hermano Roger todo emporio en lo que aquel entonces era el finis terre: Las Coloradas. Salinas desde los tiempos de los mayas , descubiertas casi por casualidad por don Joaquín, y explotadas por un golpe de la fortuna: el hundimiento de un barco que transportaba hule, material muy apreciado en tiempos de la Segunda Guerra Mundial, permitió a don Joaquín recolectarlo y tener el capital necesario para iniciar el desarrollo. A la historia le gustan las simetrías: a la misma persona le debió don Joaquin la vida pues lo llevó con un medico tras haber recibido dos puñaladas, le habló de las míticas salinas y le presentó a la mujer que don Joaquín amó con pasión hasta el último día de su vida , doña AMIRA Diaz Ruz.Don Joaquín y su hermano don Roger, con quienes trabajé, eran hombres recios , audaces y muy trabajadores. Mar y Sal es un libro con sabor sal que es el sabor de la vida.