Martin Tritschler y Córdova: Arsobispo de Yucatán.

MARTÍN TRITSCHLER Y CÓRDOVA, EL ARZOBISPO DE YUCATÁN, ARZOBISPO DE MÉXICO

Debo a don Gustavo Velarde Tritschler extraordinarias noticias sobre su tío bisabuelo don Martín Tritschler y Córdova, primer arzobispo de Yucatán. Un documento es de llamar la atención: “Sucesión arquiepiscopal de México en 1908”, de la autoría de Francisco Javier Meyer Cossío, editado por El Colegio de Michoacán.

El 30 de marzo de 1908 murió don Próspero María Alarcón Sánchez de la Barquera, arzobispo de México. Don Próspero se había distinguido por mantener excelentes relaciones con don Porfirio Díaz. En el año de 1897 don Porfirio sufrió un atentado del que salió ileso, don Próspero se apresuró a celebrar un Te Deum en acción de gracias por no tener que lamentar daños en la persona de su buen amigo: el presidente de México. Para corresponder ésta y otras atenciones el Gral. Díaz nombró al secretario de don Próspero , Luis Aguilar, diputado federal. Muerto don Próspero se empezaron a mencionar algunos nombres para sucederlo: don Aténogenes Silva, arzobispo de Michoacán; don Ramón Ibarra, arzobispo de Puebla; don Leopoldo Ruiz, obispo de Linares; a un canónigo de la Catedral de México, don Antonio J. Paredes y al presbítero Joaquín Araoz. Pero he aquí que don Porfirio tenía sus intereses particulares en la sucesión y así se los comunicó a su representante en Italia, don Gonzalo Esteva: “Sería conveniente nombramiento de obispo de Yucatán Martín Tritschler para sustituir arzobispo Alarcón pero repito que sin mencionarme a mi o mi gobierno sino solo por influencia de usted”. ¿Qué motivo tenía don Porfirio para proponer a don Martín? Me parece que es pobre la tesis que aventura Meyer Cossío cuando sostiene que Tritschler era un hombre preocupado por la liturgia y sin ningún interés en los asuntos políticos y sociales. En medio de dos hombres extraordinarios, Crescencio Carrillo y Ancona y Fernando Ruiz Solórzano, don Martín Tritschler queda un tanto atrapado , de ahí lo interesante de esta noticia ; sin embargo es posible que, más que el desinterés del entonces obispo de Yucatán por las cuestiones sociales y políticas, haya influido en el ánimo de don Porfirio su visita al estado en 1906. Lo cierto es que el Héroe de la Paz se habrá llevado una sorpresa: el ministro Esteva le informó que , según sus noticias, el presidente de México no era muy bien visto en la Santa Sede, el Papa no había recibido las debidas atenciones de don Porfirio, entre lo más grave estaba el no haber recibido contestación a un telegrama. Asimismo le informó de los aspirantes que podían considerarse como tales: don Leopldo Ruiz, don José de Jesús Ortiz, arzobispo de Guadalajara, Ramón Ibarra, Francisco Plancarte, arzobispo de Cuernavaca, José Mora y del Río, obispo de León , y don Martín Tritschler , arzobispo de Yucatán. Finalmente el elegido para suceder a don Próspero fue don José Mora y del Río. Don Martín, tras sufrir los estragos de la persecución religiosa y de padecer cárcel y destierro, murió en Mérida sin ser removido de su sede. Se dice que don Fernando Ruiz Sólorzano por su genio extraordinario y su simpatía personal pudo haber sido promovido a otras posiciones, pero que fue el propio don Fernando quien se rehusó a cambio alguno. Estas versiones no han sido documentadas, como lo ha sido la de la promoción del señor Tritschler.

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