CRÓNICA DE UN INFORME

El tiempo es la medida de la vida, por eso nos propusimos llegar  antes lo previsto al flamante recinto donde el señor gobernador Vila Dosal daría un mensaje con motivo de su primer informe.

PRESENCIAS

Desde lejos saludé a José Chapur Zahoul que era conducido a otra sección del amplio salón.  Saludé a Sergio Abraham Mafud y conversé con su hijo Sergio, el tema: la propuesta para nombrar una calle como Dr. Fernando Dájer Nahum.  Le comenté a Sergio que el Centro Libanés que el preside debía enviar una carta al Ayuntamiento para que formalmente se inicie el procedimiento. Convino en hacerlo.  Crucé  festivas palabras con mi viejo amigo Víctor Ferráez . Con el incansable Jorge Caamal Burgos hablé de restaurantes de comida española en la ciudad y de sus tiempos en la Coparmex.   Se acercó José López Campos, presidente nacional de los comerciantes.  Con amabilidad vino a saludar el legislador Raúl Paz a quien le comenté que lo veía más delgado. Con sonrisas discretas me dijo : al hombre maduro los problemas y el amor lo hacen bajar de peso. Con el rector José de Jesús Williams intercambié  palabras sencillas .   El mensaje del gobernador tuvo una novedad histórica:  al centro de una larga tarima, explicaba las imágenes que desplegaban en grande pantallas que se encontraban detrás de él y frente al público.  No había más guión que las imágenes y la memoria del gobernador.   Sin lugar a dudas todo dinámico y talentoso.

 

AUSENCIAS

En términos generales ya hay una guía para hacer un buen gobierno: los caudillos y los mesías son productos anacrónicos e improvisados.  Para nuestros países los indicadores  son muy claros: la gente que se saca de la pobreza, la gente que tiene más y mejor cobertura de educación, alimentación, salud y vivienda.  Evaluar es medir y medir es comparar.  Para lograr la evaluación existen índices internacionales , nacionales y locales.  La práctica de ignorar estos puntos y sus índices nunca ha favorecido a ningún gobierno.  El índice cardinal de medición del desempeño de un gobierno es el porcentaje de pobres que pudo sacar de la postración.  Sin embargo en esta tarea el gobierno es actor indirecto: fomenta el empleo que dan las empresas y fomenta a los microempresarios, en este campo el gobierno estatal está actuando en forma extraña: repartiendo créditos.  La microempresa no se hace con dinero sino con los activos internos de los hombres.  Lo que se está haciendo tiene perfil populista.  Hay índices de gobierno que no le son favorables a Yucatán y que no se exponen como áreas de oportunidad , solo se ignoran o se enuncian con vaguedad triunfalista.  A decir verdad no se acude a un tablero de gestión que tome los indicadores internacionales , nacionales y locales y que exhiba la situación.

 

Otra observación: los últimos gobiernos han demostrado una aversión a los estados financieros.  Antes no sucedía esto: el gobierno estatal publicaba un estado financiero con la opinión de un contador independiente, algo simple pero muy significativo.  Desde hace tiempo no sabemos más que datos aislados, poco significados en medio de todos los eventos financieros del gobierno.  El Ayuntamiento de Mérida si publica cada mes un estado financiero, lo que constituye un acierto. Otra pálida presencia fue la de las actividades culturales, prácticamente inexistentes. Apenas si se tiene que decir lo que significa para un pueblo la actividad cultural como creadora de la infraestructura moral.  El henequén duró en pleno esplendor unas décadas, la poesía y la canción yucateca perduran: han configurado en mucho el temple del pueblo y nos revelan al mundo.  Otro tanto se puede decir de los trabajos historiográficos y de que en Yucatán se publicó la primera novela histórica de México , de la autoría de Justo Sierra O Reilly, y la primera de ciencia ficción de Eduardo Urzaiz Rodríguez.  Quizás por esa ignorancia  el único miembro, si es que eso se puede decir, de la comunidad artística y cultural que se encontraba en el recinto era el maestro Armando Manzanero.  El hecho de que el gobernador ignore a esa comunidad no quiere decir que no tenga vida propia, de la que algún día tendrá conocimiento el actual gobierno.  Churchuill decía que no había forma de hacer un buen gobierno, que finalmente los problemas se resolvían solos, y que, posiblemente, si se metía menos se resolvían mejor.  Pero hasta en este caso es necesario atender a la crítica.  La característica de un mal gobierno es ignorar a la crítica, esa  amarga pero leal colaboradora.  El señor gobernador ignoró los señalamientos y presuntas pruebas de malos manejos en su administración: no dijo una sola palabra.  Como obvió el tema del día:  la promulgación y súbita derogación del impuesto a la seguridad, así como la manera en que se va cubrir el déficit, que se ha dicho, tienen las  finanzas del gobierno estatal.  Personalmente salí intrigado por la falta de estas referencias y así se lo expresé , mientras nos dirigíamos a la puerta, a Alberto Abraham Xacur, que compartió mi punto de vista. Visto lo que ocurría en la calle nos es difícil estar de acuerdo con los que opinan que desde el primer año del gobierno de Loret de Mola no se veía iniciar un período de gobierno con tanta convulsión.  Apenas dicho esto hay que añadir el gobierno de Tomás Marentes Miranda.  Todo gobierno se desgasta al paso del tiempo.  Los tres primeros años son aguas tranquilas para navegar rápido,  en los tres siguientes hay que aguantar las tormentas de la evaporación lenta pero constante del poder.  Claro que hubo logros importantes en los campos del turismo, la salud, el crecimiento económico, la seguridad , que es el activo más valioso del Estado,  y el mismo consejo para la aplicación del presupuesto, entre otros tantos.  Y más aun, se  puede confiar  en Mauricio Vila Dosal, ya demostró ser un muchacho que aprende rápido y podemos esperar cambios y adecuaciones para la inminente reingeniería de su gobierno.