MICROEMPRESAS Y AUTOEMPLEO EN LAS GENEALOGIAS ESPERANZA Y MIRAFLORES
La genealogías de las colonias Esperanza y Miraflores pertenecen al delicioso oriente de la ciudad. Estas colonias tienen un perfil muy definido y así se ven sus microempresas. Encontramos una casa que vende Coca Colas y también hielo . Por la zona es muy común lo que hemos visto en otras rumbos: los sábados y domingos se venden panuchos, salbutes, caldos y tortas de pavo. En un establecimiento se brindan terapias física y relajante, masajes para dolores reumáticos y articulares. No pueden faltar las piñatas que satisfacen una importante demanda. Encontramos un taller de reparación de calzado lo que es muy interesante: vivimos una era desechable y la reparación también repara la economía. Se ofrece limpieza de alhajas de oro y plata , también de platería y se venden pilas para relojes. Una tienda tiene un nombre encantador : “La Bodega de la Turca” que ofrece salchichería . No menos cautivador es el nombre de una casa de empeños: “Se fue y volvió”, cobrando el “5% real” se acepta de todo. Una alquiladora de disfraces parece soportar con dignidad la falta de eventos. Un taller se ofrece para cargar acumuladores. Y un sitio llamado “Sendero de la luz México ” ofrece sus servicios a las personas que sufren: celos, tristeza, soledad, ansiedad, depresión , angustia, neurosis, soledad, alcoholismo y drogadicción . En una casa se dan clases de inglés y en un local clases de box . Con asombro se lee que un domicilio particular se repara ropa, se cambian cierres, se rectifican costuras y se hacen dobladillos. Por otro lado se rentan brincolines y hay un amplio establecimiento que renta trajes de etiqueta. Nos encontramos con un bazar de plantas. Desde luego que aparecen las ofertas de préstamos sobre autos. En un lugar se reparan placas dentales. Existe una suerte de taller en que se restauran, diseñan y venden: cuadros, ángeles, vírgenes y santos. Se ofrecen clases de yoga, disciplina que ha cobrado importancia especial durante la pandemia. En una casa existe un negocio domestico basado en tejer petatillo. Hay ventas de garaje, albergues para ancianos y un anuncio sorprendente: “Milenium , lectura del Tarot”.
