Por Gonzalo Navarrete Muñoz | Publicado en Linea Recta | Junio 2015
Mapa: Google maps
Si bien es cierto las colonias solían surgir apartadas de los núcleos urbanos no es menos cierto que se vinculaban a un barrio colonial, del que no podían separase por sustentabilidad, y que engendraban otras colonias. Así en la ciudad de Mérida existen nueve genealogía: Chuminópolis, Wallis Esperanza, Miraflores, Los Cocos, Inalámbrica, Pensiones, García Gineres, Itzimná-Colonia México y Jesús Carranza.
Chuminópolis, Wallis-Esperanza, Jesús Carranza, Itzimná-Colonia México y Miraflores están vinculadas a Mejorada-San Cristóbal; Los Cocos a la misma Plaza Principal ; García Ginerés a Santa Anna; Inalámbrica y Pensiones a Santiago, con mayor precisión a el antiguo Santa Catarina que revivió don Olegario con el nombre de Parque de La Paz; La genealogía propicia los elementos que le dan valor a los terrenos: autosustentabilidad, conectividad y el nivel humano. Algunas colonias han surgido huérfanas pero finalmente son adoptadas por alguna genealogía. Las colonias que permanecen ajenas a las genealogías carecen de los elementos de valor, o, al menos, alguno de ellos. Una colonia engendra a otra y esta a otra compartiendo infraestructura con todo lo que implica. Mérida tine un valioso trazo radial que recorriendo las distintas colonias hasta llegar al periférico, sin embargo cruzando esta vía, salvo alguna excepción, no se continúa el trazo radial y en ese sentido las colonias que nacen después del periférico no solo son huérfanas sino que no ofrecen soluciones a su condición en las próximas décadas. Por otro lado es lamentable que el acierto de trazo radial se haya perdido. Lo que siempre prevalecerá será la concepción genealógica de las colonias de Mérida.
