Uno de los grandes sucesos tras la invención del fuego lo es la Revolución Industrial. Las causas son múltiples: aumento de la población por disminución de mortalidad, mejora de la producción agrícola, penetración de las ideas del liberalismo (Locke, Hume , Hobbs) , etc; pero el detonador lo es el invento de la máquina de vapor . Este mecanismo encuentra su antecedente en Alejandría, siglos antes de que James Watt sofisticara el procedimiento en Inglaterra. La primera máquina que usa el vapor como fuente de energía se llamó Eolípila y fue creada por Herón de Alejandría. La máquina de vapor creada en Inglaterra desplazó a los animales de tiro, la fuerza del viento y al propio hombre. Consecuencia: se elevó la producción a niveles nunca vistos. Se sostiene que Jerónimo de Ayanaz y Beaumont, militar, pintor, cosmográfo y músico, pero antes que nada: inventor, registró la primera máquina de vapor en 1606, más de cien años antes que la de Watt. Esta primera máquina de la Revolución es la insignia de la transformación, sin embargo vinieron otras que cambiaron el mundo para siempre. En 1800 Alexandro de Volta inventa la pila. En 1879 Thomas Edison presentó la lámpara incandescente ante una sociedad a la expectativa, porque no era el ser lo que prevalecía sino el cambiar, innovar. El ferrocarril, que empezó a trabajar con combustión interna, primero usó el carbón y luego el petróleo, transformó para siempre la economía mundial. El teléfono es una consecuencia se la Revolución Industrial. Se le atribuye a Alexander Graham Bell la invención del teléfono en 1876. Este aparato reproducía sonidos gracias a la energía que se transmitía por un cable. En 1885 Karl Benz desarrolla el primer motor de combustión interna, naciendo así el primer automóvil moderno. En 1899 los hermanos Wrghit inventaron el avión, con un procedimiento similar. Después de la Revolución Industrial el mundo nunca volvió a ser el mismo. Debemos precisar que se trata de dos períodos en sí misma y dos revoluciones: la Industrial y la Francesa. La Revolución Industrial ofrece la posibilidad de mayor cantidad de producto, pero se requiere quien lo compre y para eso son necesarios mujeres y hombres libres. Los hombres de La Ilustración habían tomado las ideas del liberalismo de los filósofos ingleses y estas ideas prevalecieron en la Independencia de los Estados Unidos, aunque nunca pudieron tener mayor efecto en las independencias de los países latinoamericanos. En Inglaterra –si es válido usar este término- se dieron dos fenómenos adicionales: las ciudades crecieron porque la gente fue en busca de trabajo en las fábricas modernas; y se incrementó el comercio exterior. Inglaterra se había distinguido en el comercio exterior, más allá de la piratería, desde el siglo XVI, pero el advenimiento de la era industrial implicó menores costos y mayor productividad, nadie podía competir con esto. La legendaria industria textil inglesa es el gran ejemplo: fue el gran producto de exportación hasta el mítico pasaje de Gandhi.
