Durante la Colonia cultivábamos tabaco, algodón, azúcar , sal y el legendario Palo de Tinte, conocido en el mundo como palo de Campeche, entre otros productos agrícolas. En el siglo XIX surgieron nuestras tentativas industriales: se trabajaban pieles, se hacían guitarras, bastones de carey, jarcias , sombreros  y otros productos que se elaboraban entre la artesanìa y la industria.  Por fin surgìo un emblema en la historia de Yucatàn: La Aurora, fàbrica de telas levantada en Valladolid. El pobre rendimiento del algodón  en nuestra tierra y los costos de importación impidieron el funcionamiento de esta planta histórica. La incipiente industria, alguien podrá decir artesanía,  se transformó en 1880 cuando empieza  una revolución   en Yucatán con la industria henequenera. Se necesitó de mucho talento y mucho trabajo para lograr los niveles de producción que se alcanzaron. El proceso de cortado de hojas y de raspado fue de gran ingenio. La era henequenera duró cerca de 50 años , de las dos últimas décadas del siglo XIX a las tres primeras del veinte. En ese período se intentó la industria cordelera , pero fue un fracaso. La famosa Industrial , cordelería de esa época, no pudo sostenerse y se quedó como un referente histórico. Empero , a principios del siglo XX se fundaron dos industrias que se convirtieron en íconos de la economía del Estado: la Cervecería Yucateca y la Fábrica de Pastas y Galletas Dondé. La calidad en los procesos y la política de recursos humanos distinguieron a estos dos titanes. Se pagaban días completos a los empleados enfermos y se les daba servicio médico y medicinas, a ellos y a sus familias. Habían fábricas de hielo, chocolate, rones, habanero y licores; también en el campo de la medicina hubo algunos casos notables :  el Mentolatum y el bálsamo Castro son ejemplos emblemáticos. Pero se distinguía lo que fue la Hidrogenadora Yucateca, que nace con una sociedad de la familia Madero, la de don Francisco I Madero, de Nuevo León y don Agustín Vales Castillo.   En 1912 aparecen los productos Cardín que son toda una tradición en Yucatán y han conquistado los mercados regional y nacional; desde luego otro tanto se pude decir de los productos La Anita, los recados que conformaron el paladar de los yucatecos. Tiempo después apareció una industria histórica: Veladoras El Faro. Sin embargo tras la expropiación de las haciendas se empieza a formar la idea de fundar una industria cordelera local. Las pretensiones se logran y se abre un nuevo y riquísimo capítulo sobre la industria en Yucatán. Expropiadas las cordelerías a principios de los sesentas se iniciaron algunas tentativas , una de ellas fue la fábrica de zapatos Yvi. Sin embargo los capitales migraron a la industria ganadera o al turismo como es el caso del hotel María del Carmen. Desde luego de tiempo atrás existía con pujanza la Industria Salinera de Yucatán que conquistó el mercado nacional tanto en sal en grano como en sal refinada con la celebre marca Sal  Sol. También existía de años antes la industria refresquera , primero la Pino y después la Coca Cola, que por si sola logra un capítulo en la historia de la industria de Yucatán . Mención muy especial merece la industria del vestido que fue creciendo hasta exportar las clásicas guayaberas yucatecas.  Cementos Maya y Materiales Mitza se distinguen en la industria de la construcción, segmento al que vino a sumarse con particular éxito Materiales Procon. En la industria alimenticia hicieron su aparición Proalmex con la horcharta Deliciosa y  El Yucateco en el campo de los recados. Capítulo muy especial merece la industria avícola que  se intensificó logrando un nivel muy importante con la empresa Campi. La industria maquiladora constituye otro capítulo muy importante en la historia de Yucatán. Impulsada por la ampliación del puerto de altura , la industria maquiladora colaboró mucho en el momento de la liquidación de Cordemex, la paraestatal que absorbió a las cordelerías privadas. A un tiempo se desarrolló la industria porcícola y la de elaboración de alimentos. En los años ochenta nace una empresa que pasando el tiempo ha tomada visa internacional: Airtep, fabricante de aires acondicionados.  La industrialización es un proceso liderado por la innovación: lo que fue moderno pronto deja de serlo, y por las fuerzas del mercado. Ha habido grandes esfuerzos en la historia de Yucatán por impulsar estos esfuerzos que han escrito páginas luminosas de nuestra historia.