Miguel de Cervantes y Saavedra y su mítico personaje son amigos de todas las casas del mundo de habla hispana. Sin embargo muy pocos han leído la magna obra o se han acercado a la azarosa vida del autor. Sin embargo es sorprendente lo que se ha dicho y se puede decir de la obra y del autor. Hay una frase que parece identificar al Quijote: “Cabalga Sancho y que los perros le ladren a la luna”, esta frase no aparece en la obra, ni esta ni ninguna semejante. Algo similar sucede con Cervantes, se le llama “el manco de Lepanto”. Sin embargo manco propiamente no era. Como resultado de un cañonazo que le afectó Cervantes era lo que podemos llamar “tullido”, pero nunca le fue amputado el brazo.

La vida de un autor puede tener poca relación con su obra, pueden ser cosas distintas. Algunos piensan que interesarse por la vida de un autor es tanto como interesarnos por el color de sus ojos o por el estado de sus dientes. Sin embargo es posible que el caso de Cervantes sea diferente. Borges cambió la forma de adjetivar en la lengua castellana, sin embargo no es un invitado en la casa de todos nosotros. Sus ideas políticas no son apreciables: celebraba las dictaduras y la esclavitud en la segunda mitad del siglo xx, sin embargo eso es ajeno a su obra portentosa. Pero Cervantes es el autor por excelencia de nuestra lengua y quizás eso justifique esta modesta aportación.

Hay cierta certeza de que Cervantes nació en Alcalá de Henares sin embargo reclaman el suceso: Esquivias, Sevilla, Lucena, Madrid , Consuegra, Toledo y Alcazar de San Juan , en la Mancha. Desde aquí notamos las posibilidades que se han tenido para cargarle toda clase de hechos y datos al personaje. Se ha sostenido que Cervantes copió o se inspiró en mucho en la obra de Mateo Rosas de Oquendo que era muy afecto a los libros de caballería , de ahí que Cervantes se burlara un poco de ellos. Ernesto Sábato ha sostenido que para cuando Cervantes escribió su obra las novelas de Caballería no se leían, quizás esto alimente la teoría de alguna copia o plagio. El tema en si puede importar poco si atendemos a que Cervantes nos presenta todas las técnicas narrativas que han guiado la historia de la literatura universal. No solo importa lo que dice sino como lo dice, he ahí lo trascendente en la obra cervantina. Algo semejante podemos decir de su celebre contemporáneo Shakespeare: sus temas aparecen en la literatura desde los tiempos de la tragedia griega, sin embargo él los pone en verso y en piezas de teatro. Esto no es suficiente para describir el genio de Shakespeare, también hay que destacar su inmenso talento para expresarse: si hubiera dicho “Morir o Vivir”, nunca hubiera logrado el mismo efecto que Ser o no Ser.

DIME QUE COMES Y TE DIRE QUIEN ERES

Cervantes se atiene a una máxima poco controvertida: “dime que comes y te diré quien eres”. Así define al Quijote: Una olla de algo más vaca que carnero, salpicón las más noches, duelos y quebrantos los sábados, lentejas los viernes, algún palomino de añadidura los domingos, consumían las tres partes de su hacienda”. De manera tal de que habría que revisar todas las recetas que aparecen en El Quijote . El carnero es una carne más apreciada que la de vaca que se comía en forma habitual frita, receta emparentada con “la ropa vieja”, menú modesto pero no propiamente pobre. Los “Duelos y Quebrantos”, nombre poético, llevan panceta de cerdo, jamón, picadillo de chorizo , seso de cordero, huevos, laurel, vinagre, aceite de oliva , sal y pimiento y cuarto litro de leche. Es un revoltillo de huevos muy enriquecido, no es comida para una mesa resueltamente pobre. Las lentejas han de verse como una suerte de potaje que lleva pedazos de carne de puerco y alguna verdura. Las lentejas producen melancolía, que es una pasión no propia para desfacer entuertos. Hay varias clases de salpicones , invocamos uno: Palomino en Salmorejo de Limón, pichones cebados, limones, vino blanco, láminas de tocino, cucharadas de mostaza, nuez moscada, sal y pimienta. Como se verá estamos ante una receta compleja y con ingredientes de valor. Parece ser muy justo el menú : es de un hidalgo de mediano pasar pero no pobre. Quizás, en muchos momentos de su vida Cervantes no pudo tener algo semejante y se conformó con un ajoarriero que era bacalao seco con ajo. Quizás por eso se lee en EL Quijote: “no comas ajos y cebollas porque no saquen por el olor tus villanías”. Las estrecheces de su vida lo llevaron a proferir una frase celebre: “muera marta, pero muera harta ”. Desde luego que hay comida opulenta en El Quijote, cito una: Las Albóndigas de las Bodas de Camocho, o Albondigas Repentinas; carne de cerdo, panceta de cerdo, carne de cordero, miga de pan, cucharadas de manzanilla, leche, vinagre, canela, huevos, harina, pan rallado, aceite de oliva y sal y pimienta. Hay otras muchas recetas de El Quijote que son celebres y han dado lugar a otros tantos libros. Por supuesto que ellas son ajenas a las dificultades económicas con que vivió Cervantes toda su vida.

LA LEY Y LA JUSTICIA

Cervantes produjo líneas memorables sobre la ley y la justicia, tanto que algunas, como el discurso del juez, son invocadas una y otra vez en la administración de justicia. Sin embargo en la procelosa vida de don Miguel existen graves problemas con la justicia. Digamos que el más grave es la acusación de haber cometido un homicidio. Apenas se dice esto hay que hacer una acotación : existe la teoría de que se trató de un duelo en el que no hubo muerto. Los motivos del duelo o la acuchillada son desconocidos. Fue juzgado y condenado, por esto huye a Roma y queda bajo la protección de Julio Accuaviva. Al menos dos veces estuvo preso, desde luego el cautiverio en Argel no cuenta como penitenciario dado que fue el producto del secuestro de unos piratas después de la batalla del 7 de octubre. Una de las veces que estuvo preso fue por excederse en sus funciones como cobrador de impuestos y la otra por la quiebra del banco donde depositaba los impuestos que recolectaba. Lo cierto es que nunca le cuadraban las cuentas. De estas experiencias carcelarias pudo haber nacido su amor por la libertad:” la libertad Sancho es uno de los mas preciosos dones que a los hombres dieron los cielos. Con ella no pueden igualarse los tesoros que encierra la tierra ni el mar encubre, por la libertad así como por la honra se puede y se debe aventurar la vida, y por el contrario, el cautiverio es el peor mal que puede venirle a los hombres”. Al margen de todo este es el primer discurso liberal de la historia de la humanidad. No parece que Cervantes tuviera una firme idea sobre la honra que tanto defendió su personaje. Sin embargo no hay que olvidar uno de sus párrafos más notables : “dichosa edad y siglos dichosos aquellos a quien los antiguos pusieron nombre de dorados y no porque en ellos el oro, que en esta nuestra edad de hierro tanto se estima, se alcanzase en aquella venturosa sin fatiga alguna, sino porque aquel entonces los que en ella vivían ignoraban estas dos palabras: tuyo y mío”. Todo es de todos y no hay que reclamarle anda a quien así proceda. Hay indicios de que tuvo tratos comerciales con los encantos y favores de una de sus hermanas. Esto, de ser cierto, excedería mucho sus faltantes en la cuentas. De suyo los relatos de los amores inoportunos de las hermanas de Cervantes incluyen a la hija de éste: doña Isabel Saavedra. Su recurrente situación económica y sus medidas desesperadas han dado lugar a la idea de que Cervantes era afecto al juego. Tenemos que estar claros: es mucho lo que se le puede cargar a una vida tan agitada como la de don Miguel de Cervantes y Saavedra.

AMORES Y DESAMORES

Cervantes tuvo una hija con una señora Ana Franca , esta hija fue criada por su hermana Magdalena y el propio Cervantes la presentaba como muchacha de servicio sin embargo asistió a su boda presentándose como su padre. No se tienen claras las noticias de la índole de los amores con doña Ana Franca y su destino desventurado. Por ese tiempo don Miguel ya estaba enamorado de doña Catalina de Salazar , con quien se casó. Era un hombre que creía en el amor , sin embargo lo vertiginoso de su vida no se nota en el campo del amor, donde hubiera habido persecuciones de maridos o amantes ofendidos, dramas de mujeres despechadas , historias truncas de amor. Posiblemente las hubo pero no trascendieron como sus trastornos económicos.

Hay entre Cervantes y su personaje una íntima relación, ambos no viven en su biblioteca, viven el mundo y lo viven con una intensidad increíble. Mitos o realidades no podemos negar que Cervantes era un hombre lleno de pasión por la vida, tal como el Quijote. No es posible pensar que una obra como El Quijote la escribiera un sereno sacristán. Hay tanta pasión en la vida de don Miguel que a siglos de haber muerto vive todavía. Y dentro de cien años , alguien aquí, como nosotros hoy los estarán recordando.